Integrantes del Grupo Conservacionista del Museo Paleontólogico de San Pedro no tienen dudas respecto a que pertenecieron a aquella defensa histórica ocurrida el 20 de noviembre de 1845: “Están a diez metros de donde estaban atadas en el monolito, nosotros no tenemos dudas que son de la batalla, tienen el grosor que Mansilla indica en sus notas, la oxidación que corresponde a los objetos que han estado sumergidos vinculados a la batalla, están colgando incrustadas en la roca, en la pared del río”, precisó José Luis Aguilar.
Según el paleontólogo, por la bajante del río, este es un momento ideal para retirar la cadena que está agarrada a la barranca. También comentó que hay otro tramo de un metro, prácticamente igual, que fue hallado por otro pescador hace muchos años en la misma zona.